Pasaron cinco días,
y que no hayan sido cuatro, sino tres los muertos
eso también es parte
del huevo de la serpiente,
estemos atentos, tengo que estar atenta.
Este cambio, esta modificación en el número de las víctimas, no es más que una traición al no recibir una información genuina certera, información por demás interesada
es la traición a un estado democrático, que surgido de elecciones legítimas, y elegido por la mayoría se ha intentado desgastar de todas las maneras posibles, y no es la primera vez...
como dijo, expresó, la presidenta
la situación
no se ha desmadrado
se ha apadrinado
como en el 2001, y no en diciembre, sino ya en noviembre de ese año en afiches donde se anunciaba que estaban listos para volver (algunos rostros no están, otros cambiaron de lugar, y algunos siguen siendo los mismos)
Ante todo veamos que los momentos históricos son distintos, los gobiernos también,y lo somos también nosotros
el texto original, 10 de diciembre en Villa Soldati, lo escribí el viernes 10 de diciembre a las 10 de la noche, viendo televisión,
en el aniversario de la creación de los derechos humanos y del tercer año de gobierno de Cristina Fernández, con la evaluación de su gestión, y pegado a su discurso, en cadena nacional.
No lo modifiqué porque creo que lo que vale es esta reflexión. Reflexión sobre como somos manipulados, como se nos arrebata la verdad con un título o una noticia sin chequear o deliberadamente falsa o solo veraz, ya que hay diferencias entre la verdad y la veracidad, entre lo que vemos, lo que nos muestran, y lo que ocurre realmente.
Abrazo
