Cuando eramos chicos (por lo menos a los de mi edad) nos decían que también se aprendía a los golpes... los que nos daban nuestros amorosos padres y más tarde los de la vida... luego cuando crecimos encontramos otros tipos de golpes, los que no dejan moretones o los que te borran la memoria ( como la teoría, la dinámica del shock como plantea Naomi Klein) que son los institucionales, los de "al estado", los económicos, y los mediáticos como en los últimos 10 / 15 años. Pero ahora también están los golpes parlamentarios o congresarios como más te guste y en el más amplio sentido del término.
La nota siguiente es para reflexionar sobre ambos, los reales y los otros, porque parece que las cosas no son como se muestran o se dicen, y actúan.
Recomiendo la lectura del texto de Jorge Giles, Golpe de baja intensidad del diario El Argentino. Jueves 18 de noviembre de 2010
