Victoria, beso la palma de tu mano.
beso la palma de tu mano,
de tu mano tibia, perfumada de juegos y bay biscuit
beso tu mano
la pequeña mano cabe en la mía, la envuelvo y la protejo
y te digo, te prometo que,
este beso no se borrará nunca,
porque cuando lo necesites allí estará
entonces, pondrás tu mano en tu mejilla o en tu pecho
y ahí estaré besándote nuevamente,
acompañándote siempre, como hoy,
sábado 31 de enero de 2009 en el balcón de Garay.